Muy buenas guapísimas!
¿Que tal habéis pasado el fin de semana? Yo no hice mucho, el viernes por la mañana cerré algunas cosas de la boda y de tarde hice una sustitución, el sábado nos toco hacer la compra del mes y el domingo partida de rol.
Como desde mayo del año pasado apenas estoy publicando en el blog, mucho menos en instagram, ya lo sabéis, vengo a contaros un poco como me fue el mes de marzo. Ya os comente en el algún post que este año iba a tomarme las cosas con mucha calma y dejar que todo fluya, en tema redes y blog, el problema es que lo estoy aplicando al resto de mi día a día y para algunas no casas no hay problema, pero para otras...la pereza y el procrastinar se están apoderando de mi y tengo que ponerle remedio.
A principios de marzo fuimos a cerrar la fecha para la boda y se lo dijimos a la familia, aquí ya empezó el drama...ya os contare porque tiene chicha la cosa.
En esa misma semana aprovechamos para hacer una escapada, hacía tiempo que teníamos ganas de ir y aprovechando que el tiempo había mejorado fuimos hasta los Bufones de Pria. Luego fuimos hasta Unquera a por unas palmeras y unas corbatas, que están súper ricas. A la vuelta paramos por casa de la prima de Ruben, aun no habíamos ido y la verdad es que vive un sitio precioso, tiene al lado un rio donde se pueden bañar, es una maravilla, ¡me dio mucha envidia!